Aquesta cita es publica originalment a Bagdadcafebcn.
«La innovación es el proceso contrario a la democratización de la cultura; ésta consiste en la difusión amplia de los valores culturales; por su parte, la innovación valoriza precisamente aquellos aspectos del espacio profano de los que lo profano mismo, en el proceso de su cultivo, gustosamente se libraría, a los que quiere superar porque son los signos, especiales malqueridos, de su carácter profano. Gracias a que la conciencia elitista se vuelve a lo profano y extrae, de las cosas más profanas, nuevas y exclusivas modas, puede producir su obra elitista en formas siempre nuevas, porque se separa constantemente de la masa cultivada y de sus normas civilizadoras. Por su parte, la democratización y la producción en masa de la cultura valorizada cuestionan permanentemente ese proceder. Mientras las masas se vuelven a lo reconocido culturalmente como valioso y, en esa misma medida, lo devalúan, la estrategia cultural-económica consiste en compensar la devaluación de los valores culturales valorizando lo que no tiene valor. De ahí que la valorización de lo que no tiene valor sea un signo de la democratización de la cultura y, al mismo tiempo, un signo de la resistencia frente a esa democratización.»
Boris Groys (2005). Sobre lo nuevo. Ensayo de una economía cultural. València. Pre-textos. p. 144-45[Über das Neue.Versuch einer Kulturökonomie. München/Wien. Carl Hanser Verlag, 1992]
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