Intervenció d’Antonia Raya al 19è Fòrum Indigestió.
El cuidado en sí es difícil de conceptualizar. Es una acción relacional, que pretende ayudar al otro en su proceso de salud o enfermedad. Lo caracteriza la preocupación por el prójimo y el compromiso con este. La manera de interactuar con la persona que recibe los cuidados implica solidaridad, confianza, interdependencia y reciprocidad.
El cuidado contempla un dar y un recibir dentro de un contexto que facilite conseguir el bienestar de la persona, sin olvidar su entorno más cercano y la comunidad a la que pertenece. Se sobreentiende que el que cuida necesita comprender al otro para poder hacerlo. Cuidar a la persona, va más allá de la mirada del individuo. Supone la mirada sobre los rasgos culturales y sociales de este. La mirada sobre el modo de vida de la comunidad a la que pertenece la persona. Ser competente culturalmente para cuidar comporta entender la manera de pensar, de sentir. Conocer las creencias y el legado social que el individuo ha adquirido de su grupo.
En ocasiones, interpretamos las diferentes realidades a partir de nuestros patrones culturales y tendemos a juzgar al resto. Consideramos nuestras prácticas culturales superiores al comportamiento de los demás. Colocamos nuestro grupo social en el centro imaginario del mundo generando una relación de hegemonía respecto al resto de culturas. Otras veces, la dominación se produce dentro del mismo grupo social en la que grupos de mayor poder se imponen, es un claro ejemplo de ello el poder económico. Durante la pandemia el grupo dominante ha sido, sin lugar a dudas, el de los “expertos”.
En un inicio, el objetivo fue identificar al patógeno y aniquilarlo. Costó un tiempo entender que no podíamos reducir el paciente a la enfermedad, puesto que el paciente pertenece a un grupo social, con una manera de pensar, de sentir, con unas creencias, con un legado social adquirido en su propio grupo. Durante todo este tiempo se han vulnerado derechos básicos de las personas. La pandemia obligó a cerrar centros de Atención Primaria en algunas zonas privando del primer nivel asistencial a la población, perdiendo esta la accesibilidad al sistema sanitario. La brecha digital ha aumentado las desigualdades en el acceso de la atención de aquellas personas más vulnerables. La falta de longitudinalidad, al perder a los profesionales de referencia, hace este sistema totalmente ineficaz. Así se recoge en el informe de Amnistía Internacional sobre la gestión de la pandemia.
Si es difícil de conceptualizar el cuidado, aún es mucho más complejo cuantificarlo. Pero os aseguro que la ausencia del mismo es altamente tangible. No poder visitar a las personas mayores, el aislamiento de las ancianas en las residencias, no acompañar la muerte de familiares cercanos, la falta de material de protección para las profesionales sanitarias, no ser capaces de salirnos del protocolo y ver la particularidad de cada caso para actuar en consecuencia, son ejemplos en los que el cuidado no ha estado presente. Y no es una crítica a mis compañeras que han/hemos intentado paliar de la mejor manera posible la situación, es una realidad que no podemos obviar. No podemos obviarla porque toda cultura recibe influencias y modificaciones a lo largo de su historia. Mi padre me curaba el mal de ojo tirando gotas de aceite en un vaso de agua, hoy en día a cualquiera le parecería un acto más cercano a la magia que algo que tuviera que curar nada, a mí, sin embargo, me aliviaba. Las culturas son dinámicas, cambian en el tiempo por la propia acción de la sociedad y/o por factores externos como ha sido la pandemia. La ausencia de cuidados en situaciones como las descritas se ha traducido en malestares dentro de la sociedad. Malestares que, de nuevo, son culturalmente diversos y no pueden reducirse todos a tener “ansiedad” y “depresión”. Malestares de los que deberíamos salir sin psiquiatrizarlos y sin medicalizarlos sino procesando y poniendo en valor los cuidados. Recordad. Ese acto relacional. Entre dos personas. Teletrabajar. Comprar por internet. Pedir comida para que te la traigan a casa. Nos aleja de esos actos relacionales. Dificulta el cuidado. Los cuidados.
Més informació sobre el fòrum: 19è Fòrum Indigestió. Aquí pots veure el fòrum sencer:
0 Respostes
Si vols pots seguir els comentaris per RSS.