Nat 12 set_03 José Luis Martín
Seguimos mareando la perdiz con la piratería y no queremos darnos cuenta de los errores más comunes de nuestra industria musical. Que si la piratería sostiene mafias de inmigrantes, explotación salarial, tráfico de drogas,… que si somos malos, muy malos y requetemalos por el hecho de justificarla…
Ahora viene otra vuelta de tuerca: las principales compañías de este país quieren que se persiga legalmente a los usuarios de los programas de P2P (Peer to Peer), los famosos programas de intercambio de ficheros. Nos quieren declarar delincuentes, al mismo nivel de los traficantes y piratas. Calculan unos 95000 usuarios de ese tipo programas en nuestro país, que se han descargado música y software por un valor aproximado de 85 millones de euros, que inmediatamente colocan en la casilla de las perdidas finacieras, algo bastante ridículo. No sé qué porcentaje de los usuarios de P2P se adentran en esos programas para bajarse esa música chicle que se consume hoy porque es moda y mañana se tira porque está caducada, que cuenta con campañas publicitarias que llegan a la televisión y que encarecen el precio final del disco de forma alarmante. Ese perfil de usuario no creo que se gaste mucho en música, por lo que incluirlo en las pérdidas resulta algo gratuito. Sin embargo, existe otro tipo de usuario, que sí se preocupa por la música y que utiliza los programas para tener alcance a su conocimiento, ya que no resulta tan fácil que pueda escuchar lo que quiere en las radios y en las televisiones. Ese usuario termina comprándose discos. Posiblemente no en la medida de las descargas, pero podríamos considerar que esos programas le sirven de vehículo de información y, le ayudan a tener libertad de decisión, hasta tal punto que podríamos considerarlos necesarios y, desde luego, alternativos a los medios de difusión que tienen las compañías, en general manipulados y sin criterio.
¡Pero para qué vamos a darle más vueltas a lo mismo! Ante la posibilidad de que 95000 nuevos delincuentes pasemos a disposición judicial dentro de pocos meses, deberíamos ir desenpolvando viejas sentencias judiciales que han sentado jurisprudencia en el tema, como la que podéis leer en https://www.bufetalmeida.com/sentencias/software.html, de la cual hemos extraído un pequeño parrafo:
“El acusado tenía en su poder un número considerable de copias ilegales de programas, pero no hay constancia probatoria alguna de que hubiera realizado cualquier acto de tráfico o enajenación de los mismos… de modo que lo único que le es imputable es la posesión que, aun cuando pueda vulnerar lo dispuesto en el artículo 99.2 de la Ley de Propiedad Intelectual, no entraña el tipo penal por el que se pretende la condena…”
Espero que sirva para algo. Quizás los de las compañias puedan hacer fotocopias y mandarlas por correo, como hacen con las hojas de promoción, donde fusilan artículos de periodistas que hablan bien de sus discos… Y por cierto, eso también se podría considerar piratería, y si tu le dejas leer esta revista a alguien que no seas tú mismo estaríamos en el mismo caso, serías un P2P ambulante… Pues a lo mejor somos más de 95000 y no nos hemos dado cuenta.
